En el último tiempo me he encontrado con muchos niños frustrados porque no logran memorizar las tablas de multiplicar. Y detrás de ellos, mamás y papás angustiados que no saben cómo ayudarlos. La situación se repite: horas de práctica, repeticiones interminables y aún así… nada funciona.
El problema no está en que los niños repitan una y otra vez. El verdadero desafío es que no entienden lo que significa multiplicar.
Antes de pedirles memorizar, necesitamos que comprendan que multiplicar es simplemente sumar varias veces. Cuando los niños logran darle sentido a las operaciones, todo fluye mejor.
Para enseñar de manera práctica y entretenida, podemos apoyarnos en juegos cotidianos. Desde una torre de jenga, hasta dados, cartas o juegos de mesa, todo puede transformarse en una herramienta lúdica que acerque a los niños a las matemáticas.
Pero ojo: si un niño aún no maneja nociones básicas como seriación, clasificación o conservación, será muy difícil que avance en el aprendizaje de las tablas. La clave está en construir primero esas bases, y luego avanzar hacia lo más complejo.
🎥 En el reel que preparamos te muestro cómo abordar este tema de manera simple y entretenida.
Y si quieres profundizar más, te invito a conocer nuestros servicios de psicopedagogía: porque aprender puede ser mucho más liviano cuando se hace con acompañamiento adecuado.